Diosas de la noche; el mundo de la prostitución y sus peligros

Cada noche cuando cae el sol, son sus buenas piernas las que modelan por las banquetas, y es el taconear de sus exuberantes tacones el ruido que rompe el silencio de las calles por el centro de Mexicali, estas mujeres se dedican a vender amor a precio caro y es que la prostitución es su mundo. 

El sexo servicio es una industria en la que la mayoría caen a temprana edad, ese es el caso de Alexia Acosta que inició a los 15 años ”Pues fue por parte de una amiga, que me invito a conocer la vida galante y me dijo pues si no te gusta te regresas a tu destino y pues aqui estamos ” contestó en tono sarcástico.

La prostitución no está reglamentada ni prohibida en México por lo que es tolerada en todo el país y en ciudades fronterizas como Mexicali Baja California se ha convertido en una práctica ideal para generar ingresos.

A las "Diosas de la noche" se les ve libremente dia y noche en la zona centro de la ciudad, mostrando sus encantos a cualquier espectador dispuesto a comprar un momento de placer.

A pesar de ser una actividad tolerada, los tabúes y estereotipos sobre este oficio hacen que constantemente las personas que se dedican a esto en particular las mujeres transgénero sean discrimindas por las sociedad y las mismas autoridades de acuerdo a denuncias de estas chicas.

Veronica Ustoa, se dedica al sexo servicio desde los 19 años, ahora tiene 40 años, ella dice que en repetidas ocasiones ha sido víctima de abuso de autoridad por parte de policías municipales en Mexicali “yo siento que ellos abordan más cuando una les habla a los clientes que cuando las mujeres le hablan a los clientes entonces nos han parado y nos han dicho que es un delito que a nosotras nos traigan arriba del carro y yo veo que a las mujeres las traen arriba del carro y a ellas no les dicen nada. Osea no entiendo cual sea la diferencia si al fin y alcabo las dos somos sexoservidoras y estamos ofreciendo un servicio ”.

El “servicio” como Ustoa le llama a su oficio cuenta con muchos riesgos, sobretodo en la región del estado de Baja California, el cual ocupa el quinto lugar a nivel nacional en crímenes de odio hacia la comunidad LGBT. 

La violencia no es ajena para este grupo, Acosta quien apenas tiene 21 años recuerda un atentado que sufrió de parte de uno de sus clientes “me golpeo cuando el sabia lo que yo era pero me llevó con engaños que me llevaba a un hotel y así al último se estaciono en una parte me empezó a decir de cosas, me also la voz y a golpear y me dejó irreconocible un tiempo” comentó. 

Por este tipo de incidentes, las mujeres transgénero que trabajan en la zona centro de Mexicali han ido más allá de solo tomar medidas de precaución y han formado mecanismos para vigilar su seguridad cuidándose las unas a las otras.

Uno de los mecanismos es un grupo de chat por whatsapp “hicimos un grupo por lo mismo, para estarlos checando todas y donde esta y donde te ubicas y que estas  haciendo y si una sale fuera estarnos mensajeando, cuidándonos de que te paso porque igual manera hay otras chicas que les ha pasado varias accidentes y pues mas bien es eso tratar de tenernos juntas, unirnos y estar al pendiente una de la otra” explicó Ustoa. 

Sin importarles los peligros que representa la comúnmente llamada “La profesión más antigua del mundo” cada día cuando cae la noche a estas mujeres se les puede ver en cada esquina del centro de Mexicali vendiendo su cuerpo al mejor postor. Para algunas como Acosta este es un trabajo que deja buen dinero por poco esfuerzo “pues nos gusta vivir bien, lo fácil se puede decir” contestó al preguntarle porque sigue en esta industria y agregó que gran parte del dinero que gana lo inverted en su cuerpo.

Por otro lado existen aquellas como Nahomy Valtierra, una mujer trans que tiene 10 años en esta industria, y es que su vida vulnerable llena de circunstancias desafortunadas la obligó a adentrarse en la industria del sexo servicio  “A mi me discriminaron muchas veces en los empleos donde iba a buscar trabajo y pues no saben donde ubicarme si en el baño de los hombres o las mujeres y por eso opte por trabajar en esto”. 

Más del 50 por ciento de la comunidad LGBTQ en México es víctima de discriminación y Valtierra forma parte de esta estadística, ella a pesar de tener un titulo en administracion y computacion, jamás ha podido ejercer “la gente no daba antes oportunidades, ahorita no tanto la batalla como antes pero si… yo ya no creo que  me volvería a adaptar a un trabajo normal por lo mismo que ya estoy impuesta a ganar y trabajar aquí en el sexoservicio” explico.

Aunque aún se siguen registrando casos de discriminación a nivel nacional en México, en los últimos años esta comunidad de sexo servidoras trans han visto algunos cambios a su favor. 

Usto recuerda como años atrás el simple caminar por la calle era razón para que la policía la detuviera “antes no podías salir ni caminar con un jeans y blusa como ando yo ahorita no podías salir a la calle, me abordaba la patrulla y me subía a la patrulla y me llevaban a la comandancia y me levantaron un reporte porque era un delito vestirte de mujer”.

Al final de la noche este oficio es lo que les da de comer a ellas y su familia, sin importar lo que se piense y sin tener la certeza de que regresen vivas a sus hogares ellas se refugian en su fe “yo creo mucho en Dios y todos los dia salgo y me persigno y reso y lo que yo hago no tiene nada que ver con la religión” dijo Ustoa.